Se caracteriza por la frialdad emocional, distanciamiento físico y psicológico de una pareja. Ambos tratan de no estar en el mismo espacio para evitar conflictos que se transformen en discusiones. Es necesario comprender que el distanciamiento emocional se va generando de forma paulatina a través de los años y sus principales causas son la falta de comunicación y la frustración de ambos con relación a las expectativas que se tiene del otro. Se produce un estancamiento en la pareja, es decir, el desarrollo de ambos en lo que a su proyecto de vida se refiere y se diluye, y ambos pueden empezar a tomar caminos y considerar proyectos de vida individuales sin considerar al otro.
¿Lo podemos identificar?, absolutamente una de sus primeras señales es la negación del hecho, es decir, evito el problema, no me hago cargo de lo que me pasa con el otro y de lo que nos pasa como pareja y si me lo dicen me enojo.
La desilusión producto de mis expectativas no satisfechas por parte del otro generan frustración y la sensación de estar solo se hace presente afectando la comunicación ya que cada vez se hace más difícil expresar los deseos propios, las opiniones, sentimientos y emociones, evitando tener conversaciones intimas. Producto de lo anterior la pareja empieza a perder el equilibrio que tenía, las necesidades del otro ya no son importantes como lo eran antes, los momentos para estar juntos, los rituales y costumbres pierden sentido, hay una pérdida de interés manifiesto por estar con el otro, la monotonía es evidente en ambos, se evita el contacto íntimo, y empieza a generarse una pérdida de interés sexual en ambos.
Por lo general uno de los miembros de la pareja presenta un mayor desinterés por el otro, así mismo hay uno que trata de tomar la iniciativa para mejorar la intimidad, que propone distintas actividades para hacer en pareja, que propone juegos, fantasías y que por lo general no son bien recibidas por el otro generando por defecto frustración, rabia, enojo. El desinterés por el otro se puede identificar incluso en la manera de vestir, es decir, no hay un ocuparse en sentirse y verse atractivo para la pareja, no así para el resto de las actividades y otras personas con las que se interactúa de manera diaria y esto no está relacionado necesariamente con temas infidelidad, es simplemente distanciamiento emocional.
El distanciamiento emocional afecta de manera concreta la actividad sexual de la pareja, reduciéndola notoriamente, ya que la búsqueda de espacios y momentos para estar en contacto y generar intimidad con el otro se evitan, una señal de aquello es que las parejas aun cuando siguen durmiendo juntos en la misma cama, evitan tocarse en ese espacio físico que por regla general…es el espacio… donde más intimidad puede generar y tener una pareja.
¿Qué se puede hacer frente a este distanciamiento emocional?… Claramente analizar si como parte de una pareja me siento así, de forma tal de buscar ayuda profesional que me permita generar acciones de mejora a nivel individual y de pareja.