La ansiedad es una emoción frecuente y normal ante una serie de estímulos comunes, pudiendo considerarse como el correlato tanto psicológico como corporal común al encontrarse frente a una situación novedosa. Como respuesta a esto aparece la activación que requerirá nuestro cerebro para actuar de manera rápida. De cierta forma, la ansiedad es una respuesta sana a algo nuevo que se ve en lo inmediato o hacia el futuro, se puede sentir como algún grado de intranquilidad psicológica, pero también física.
¿Cuándo consultar por ansiedad?
Como comentábamos, la ansiedad es una reacción completamente natural e incluso útil hacia algunos estímulos, pero esta se puede transformar en un problema cuando deja de servirnos o se vuelve marcadamente molesta. Por lo general, los trastornos de ansiedad son aquellos donde la ansiedad aparece de forma no claramente motivada, o cuando ésta es tan excesiva que en vez de activarnos para realizar una tarea, interfiere en nuestra funcionalidad.
Existen muchas causas para la ansiedad, desde dificultades en el afrontamiento de lo que estamos viviendo o que la situación en la que nos encontramos es de tal magnitud que nuestra capacidad de adaptarnos a lo que ocurre se ve sobrepasada, hasta algunos fenómenos biológico como enfermedades físicas donde la ansiedad puede ser un síntoma o algunos medicamentos que puede generar intranquilidad o ansiedad.
Es importante saber que la ansiedad y sus trastornos son sumamente comunes y manejables. El manejo se puede lograr tanto con la adecuada planificación de aquello que nos tiene preocupados, incorporar ejercicio y meditación en nuestra rutina y a través del apoyo de profesionales de la salud mental para realizar un tratamiento psicológico que puede complementarse con uso de medicamentos.
